Planeando por Anticipado

En los Buenos Viejos Tiempos y Después

Si recordamos los "viejos tiempos", las mujeres no tenían mucho para decir sobre lo que podría suceder cuando tuvieran que dar a luz a sus bebés. Las mismas entraban en proceso de trabajo de parto - algunas con algo de temor y sin hacer demasiada alharaca - pero experimentando mucho dolor; mientras que el bebé era traído al mundo gracias a las experimentadas manos de una partera o, incluso algunas veces, de un doctor. El porcentaje de muertes maternas y de bebés era considerablemente mayor durante dichos años, si se lo compara con la actualidad.

Es así que progresamos hasta llegar a los partos en hospitales, los cuales estaban equipados adecuadamente y contaban con los mejores profesionales médicos y con anestesia para asistir a la mujer parturienta de la mejor manera posible. Las mujeres eran "anestesiadas", el bebé nacía, y la mamá se enteraba de lo que había sucedido una vez que la anestesia había dejado de surtir efecto; momento en el que se despertaba. Con el correr de los años, las cosas continuaron progresando, y en la actualidad las mujeres pueden tener control de su proceso de parto en un grado mucho mayor que el que disponían algunos años atrás.  Incluso poseen las ventajas y los avances que les aporta la medicina moderna, los cuales se ponen en práctica cada vez que resulta necesario. Siendo esta una situación definitivamente ventajosa y gratificante tanto para la mamá como para el bebé.

La Aparición de los Planes de Parto

Actualmente, se puede disfrutar de otra ventaja aportada por la evolución en este proceso, la cual puede hacer que el doctor que atienda a la futura mamá se sienta un poco incómodo. La misma es conocida como: plan de parto y es creada para comunicar a todas las personas involucradas en el proceso de parto y en el nacimiento de un bebé los deseos de la mamá y/o de la pareja de la misma, relacionados con el nacimiento del bebé. A pesar de que es "su bebé" y de que usted tiene derecho a opinar en lo atinente a lo que pueda sucederles a ambos en un hospital o en un centro de partos; el plan de parto puede presentar algunos desafíos difíciles de cumplir para los profesionales médicos. Debido a este hecho, es sumamente importante que recuerde comunicarle claramente, por anticipado y de manera efectiva a su doctor de cabecera sus deseos, y cuáles son las razones que la han llevado a elaborar determinado plan de parto.

Comunicación - La Clave para la Cooperación

Es sumamente importante dejarle saber a su doctor que ha decidido elaborar un plan de parto para poder asegurarse de que el mismo/a cooperará y la hará sentirse cómoda y segura en caso de que algo no saliera como estuviera planificado. Si su doctor de confianza se ofendiera o se mostrara renuente ante dicho concepto, entonces quizás debería considerar el hecho de sopesar si dicho doctor es el adecuado para usted. A fin de contribuir a aliviar cualquier clase de preocupación de parte de los profesionales médicos, sería una muy buena idea pensar un poco cómo debería ser el lenguaje que utilizará en su plan de parto. Existen numerosos recursos en línea especialmente diseñados para los planes de parto, los cuales pueden ser descargados y usados como guía, pero de todas maneras si lo desea y se siente confiada, usted podrá crear su propio plan de parto sin ninguna clase de guía o ayuda.

No Importa lo que Diga, lo Importante es la Manera en que lo Diga

Aquí le ofrecemos las siguientes sugerencias que le servirán para comenzar a elaborar su plan de parto: presente su plan a modo de requerimientos en lugar de hacerlo como si fueran demandas u órdenes, utilizando frases como: "preferiría" y "si fuera necesario", las cuales le dejarán saber a su doctor que usted comprende que existe la posibilidad de que a último momento sea necesario implementar un cambio de planes. Incluso si utilizara el término "preferencias de parto" en lugar de "plan de parto", le estaría dejando saber al equipo de profesionales médicos del hospital que usted no está tratando de decirles cómo deberán hacer su trabajo. El hecho de ser positiva (lo esperamos por su bien) en lugar de comportarse de manera negativa (bajo ninguna circunstancia) también es sumamente importante.

Concerte una cita médica con su doctor de cabecera, con su obstetra o con su partera para poder evaluar su plan de parto (sus preferencias), y hablen sobre las cosas en las que podrían no estar de acuerdo. Juntos serán capaces de elaborar un plan de parto factible, seguro y efectivo para cuando llegue el momento tan esperado y lo necesite.

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