Cuándo Debería Llamar al Pediatra
Sin importar si es una mamá o un papá primerizo o si ya tiene hijos, pocas personas han logrado volverse expertas en el arte de saber exactamente cuándo llamar a su pediatra o cuándo hacerle preguntas sobre su bebé recién nacido.
Si llama demasiado seguido o demasiado temprano será catalogada como una mamá nerviosa; si llama demasiado tarde o si no llama la suficiente cantidad de veces será catalogada como una mamá incompetente.
En esta página hemos recopilado una lista de directivas – tenga en mente que éstas no son más que directivas o consejos que la ayudarán a darse cuenta de cuándo será el momento adecuado en el que definitivamente debería llamar por teléfono a su pediatra.
Su bebé está llorando sin consuelo.
El llanto inconsolable implica que su bebé llorará incansablemente o prácticamente no parará de llorar durante tres o cuatro horas seguidas sin importar los intentos que lleve a cabo la persona que lo esté cuidando para hacerlo sentir bien.
En otras palabras, usted ha tratado de alimentarlo, de hacerlo eructar, de arropar al bebé y de sostener a su bebito/a en sus brazos, seguramente también habrá intentado cambiar sus pañales y hacer todas las cosas que sabe que usualmente lo/a calmarán, pero nada habrá dado resultado.
Su bebé tiene fiebre (temperatura rectal de >100.3 F)
Asegúrese de estar utilizando un termómetro especialmente diseñado para tomar la temperatura rectal y de que lo haya insertado apropiadamente, con un poco de Vaselina u otra clase de ungüento en su extremo superior para no lastimar al bebé.
Incluso una temperatura de 100 F, a pesar de que puede llegar a ser atemorizante para los padres, no es definida como fiebre; y no debería preocupar a los padres del bebé. A veces, un bebé podría estar demasiado abrigado, y ésto provocaría elevaciones de temperatura.
Considere qué es lo que la llevó a tomarle la temperatura a su bebé en primer lugar – quizás él/ella experimente otros síntomas que pueden llegar a despertar su preocupación, y éstos podrían ser síntomas que requerirán que llame a su doctor de cabecera.
Su bebé se encuentra letárgico o muy excitado
Un bebé al cual sea difícil despertar podría llegar a tener una infección en su líquido cefalorraquídeo u otra condición médica grave que debería ser atendida con emergencia.
Su bebé no está comiendo, no moja los pañales o no evacúa el intestino como solía hacerlo regularmente
Siempre es sumamente importante controlar de cerca la cantidad de pañales que esté cambiando durante el transcurso de un día, ya que ésto ayudará a su pediatra a saber si su bebé, efectivamente, está comiendo menos de lo que realmente suele comer.
Usualmente, los bebés pasan por un cambio normal en sus hábitos defecatorios algunos meses despuésde su nacimiento, lo cual no debería preocuparla; pero este tipo de cambio normal estará acompañado por un incremento en la alimentación y en la frecuencia de la micción.
No existe ninguna pregunta que al llevar al hogar a un bebé recién nacido no llegue a ser atemorizante para cualquier padre. Incluso aquellos padres que cuentan con mucha experiencia en el cuidado de bebés recién nacidos pueden llegar a sentirse abrumados ante el prospecto de cuidar adecuadamente a un bebé recién nacido.
La lista mencionada anteriormente es una recopilación de "necesidades absolutas" que esperamos que le sirvan como guía para saber cuándo llamar a un pediatra será extremadamente necesario.
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