La Parte Más Fastidiosa —Elegir un Nombre de Bebé Aburrido

Personalmente los recopilo con verdadera emoción. Nombres como por ejemplo: Zoe Bowie, la hija del actor/cantante David Bowie, o Atomic Zagnut Adams, el hijo en la vida real de Patch Adams, el personaje perteneciente al film epónimo en el que actuaba como actor principal Robin Williams.

¿Cómo se atreven, me pregunto, a colocarles a sus hijos esos nombres tan fantásticos?. ¿Y qué sentirán sus hijos cuando se den cuenta de que deberán convivir con dichos nombres una vez que hayan pasado por la etapa en la que su forma de comunicación más efectiva consistía en sacar la lengua y hacer un sonido similar al de una trompetilla o al de un sonoro soplido?.

Una vez, mi hermana elaboró una lista de nombres tontos, la cual planeaba otorgarle a su desventurada hija, y yo me sentí maravillada al leer su fantástica idea y sus relatos épicos pertenecientes a los nombres que formaban parte de dicha lista. Si Margery tuviera dos mellizas planeaba llamarlas Polly Esther y Polly Ethylene.

Dejando de lado el hecho de que ambas niñas serían llamadas por sus primeros nombres y por sus segundos nombres para poder ser distinguidas, ¿Margery no se atemorizó al darse cuenta de que no sólo una de sus hijas la odiaría eternamente, sino que ambas la odiarían por haberles puesto semejantes nombres?.

Yo no solamente me sentía enojada, sino que también me sentía aburrida hasta la coronilla.

Esperé conteniendo la respiración cuando su primera hija, una niña, nació. ¿Qué nombre elegiría: Polly Esther o Polly Ethylene?. Por suerte, no fue ni uno ni el otro.

Es una realidad de la vida el hecho de que las hermanas crecen y decepcionan a aquellos que más esperan de ellas. Mi sobrina fue llamada Davida. Cuando oí ese nombre propio de la clase media me sentí sumamente decepcionada y aburrida hasta decir basta.

Falta de Respeto

Es así que perdí en gran medida el respeto por mi hermana mayor el día en que nació mi sobrina. Margie había hecho añicos una leyenda con la cual me había encariñado desde hacía mucho tiempo.

Por otra parte, ella hizo lo que yo intentaba hacer: darle a mis hijos nombres respetables, aunque no sonaran tan originales, ya que yo tampoco nunca consideré la idea de que le daría a mis propios hijos ningún nombre aburrido y común. Pero temí que cuando crecieran, tal y como me sucedió a mi misma, tuvieran que lidiar con las bromas resultantes de llevar por ejemplo: las iniciales "BM".

Yo les decía a mis compañeros que las iniciales BM eran las de Batman, pero esa invención no lograba que dejaran de burlarse de mí, lo cual me llevaba a insultarlos y a caerles a golpes.

Pero ellos simplemente se reían y me llamaban: "BM, BM," cada vez con mayor ímpetu, hasta que desaparecía del lugar con tal de que no me vieran romper en llanto.

En esos momentos juré que nunca le haría ésto a mis propios hijos. Unos años después, examiné los nombres que les dí a mis hijos una y otra vez, esforzándome para que sus nombres, apodos e iniciales no tuvieran que verse sometidos a las burlas de sus compañeros de escuela.

Es por ello, que lo más recomendable será que deje que Bob Geldof llame a su hija: Fifi Trixibelle y que deje que Frank Zappa llame a su hija: Diva Muffin.

Tengo que confesar que anoto dichos nombres con sumo placer, pero yo, bueno, prefiero elegir nombres clásicos, como por ejemplo Jane. Prefiero que cuando crezcan se quejen por haberles puesto nombres aburridos o "normales".

¡A pesar de que lo que verdaderamente deberían hacer es agradecerme por evitar que tengan que sufrir durante toda su vida el hecho de tener que convivir con un nombre ridículo!.

( Comentarios)
Iniciar or Registrese su comentario.

Envie su comentario

Iniciar o Registrese su comentario.