¿Qué es un Parto de Nalgas?
Un parto de nalgas es el nacimiento de un bebé ubicado en posición de nalgas o un parto en donde lo primero que emerje del canal de parto es la parte trasera del bebé. Cuando llegue a la semana 36 de su embarazo, su bebé será tan grande que no podrá moverse libremente de aquí para allá.
Como consecuencia de ello, la posición que asuma en ese momento probablemente será la misma posición que tendrá cuando comience el trabajo de parto. La mayoría de los bebés se posicionan boca abajo dentro del útero.
Pero algunos bebés se posicionan de nalgas. En esta posición, las nalgas del bebé se ubicarán en la parte inferior del útero, mientras que las piernas estarán flexionadas enfrente de su cuerpecito.
¿Mi Bebé Está Posicionado de Nalgas?
Por lo general, los síntomas no pueden ser identificados fácilmente. No obstante, algunas mujeres pueden adivinar la posición en la que está ubicado su bebé al sentir sus pataditas. Pero, la mayor parte de las mujeres no pueden decir fehacientemente la posición en la que está ubicado el bebé en un momento determinado.
Diagnosis
Su doctor o su obstetra serán capaces de decirle en qué posición está ubicado su bebé, al palpar las paredes de su abdomen. Otro indicio que dejaría entrever la posición del bebé es el área en donde pueden sentirse con mayor claridad los latidos cardíacos del bebé.
La única forma de estar completamente seguros, no obstante, es mediante una prueba de ultrasonido. Usando esta técnica es muy sencillo averiguar la posición exacta de su bebé.
¿Cuáles son los Factores que Causan un Parto de Nalgas?
A pesar de que parece que no hay una conexión genética relacionada con la presentación de nalgas, existen varios factores que parecen incrementar las probabilidades de que el bebé se presente de nalgas.
- Los fetos de tamaño menor al promedio no pueden acunarse y acurrucarse adaptándose al útero; lo cual les permite moverse más libremente y posiblemente orientarse en una posición de nalgas.
- Si hubiera más de un feto, uno de ellos podría empujar al otro y ubicarlo en una posición de nalgas.
- Algunas mujeres poseen un útero de forma inusual o tienen fibromas dentro del útero. En otros casos, el útero de las mujeres se estira a causa de embarazos previos, y por ello incrementa las probabilidades de que el bebé se recueste en posición de nalgas.
- Los niveles aberrantes de líquido amniótico impactan en la posición del bebé y en la facilidad que tendrá el bebé para moverse. Inusualmente, altos o bajos niveles pueden traer aparejados efectos secundarios que contribuyen a que el bebé se posicione de nalgas.
- En los casos en los que la mujer padece de placenta previa, la placenta puede llegar a cubrir la apertura del cuello uterino, incrementando las posibilidades de que la mujer de a luz a un bebé posicionado de nalgas.
¿Cuáles son los Peligros?
Por lo general, la parte más grande del cuerpo de un feto es la cabeza. Durante el parto, si la cabeza se encaja en la pelvis de la mujer parturienta, el resto del cuerpo del bebé debería deslizarse hacia afuera con bastante facilidad.
No obstante, si el bebé naciera de nalgas, es posible que el cuerpo se encajara en la pelvis de la mujer parturienta, pero la cabeza del bebé podría quedar atascada al nivel de la barbilla. Esta condición, conocida como cabeza atascada, es realmente muy peligrosa.
Si la cabeza del bebé quedara atascada, la posibilidad de que sufriera daños sería alta debido a que el cordón umbilical -usualmente- dejaría de pulsar antes de que el bebé naciera.
Ésto, en un determinado momento, cortaría el suministro de oxígeno procedente de la mamá al bebé. Si la cabeza del bebé aún permaneciera dentro del útero, el bebé no podría respirar por sí mismo; y es por ello que sería esencial que el bebito/a naciera lo más rápidamente posible.
Los riesgos que trae aparejado un parto de nalgas pueden ser evitados al dar a luz al bebé mediante una cesárea.
Corrigiendo las Presentaciones de Nalgas
Aunque la gran mayoría de los fetos eventualmente se acomodan con su cabecita hacia abajo o en posición invertida, algunos no lo hacen; sin embargo, existen maneras de tratar de dar vuelta al feto y colocarlo boca abajo.
Mediante un procedimiento conocido como: versión cefálica externa (VCE), el doctor utiliza una guía de ultrasonido para mover al feto, aplicando sus manos sobre el abdomen de la mamá y ejerciendo presión sobre el mismo.
Parto y Presentaciones de Nalgas
Aún existe alguna controversia relacionada sobre si lo mejor opción ante una presentación de nalgas es un parto vaginal o un parto quirúrgico. Es muy probable que para algunas mujeres, la ruta vaginal sea perfectamente segura; sin embargo, para otras, algunos doctores deciden realizar cesáreas ante una presentación de nalgas; ya que creen que este procedimiento es el más seguro para el bebé.
Si se intentara dar a luz mediante un parto vaginal, el procedimiento sería cuidadosamente monitoreado y si todo transcurriera satisfactoriamente, se le permitiría continuar de esta manera. Por lo general, se realiza una amplia episiotomía para ayudar a agilizar el procedimiento del parto. En caso de que surgieran complicaciones, el doctor podría llevar a cabo una cesárea.
Tratamiento
La cesárea es la forma más común de dar a luz a un bebé posicionado de nalgas. Este procedimiento quirúrgico tae aparejados mayores riesgos para la mamá; pero la mayoría de las mujeres prefieren arriesgarse con una cirugía en lugar de que el bebé sea el que corra riesgos al intentar un parto de nalgas.
Parto Vaginal Normal. Sólo debería intentarse esta opción si el ultrasonido mostrara que el bebé estuviera posicionado en una posición de nalgas favorable. La mayoría de los bebés no corren riesgos durante un parto de nalgas, pero siempre existe la posibilidad de que el bebé sea dañado o de que sufra lesiones.
Para obtener más información sobre presentaciones de parto, tales como la presentación de nalgas, lea nuestro artículo sobre presentaciones de parto.
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