La Alfafetoproteína y la Importancia de los Controles Maternos


La Alfafetoproteína
Para realizar una prueba de alfafetoproteína (o comúnmente conocida como prueba AFP),se deberá tomar una muestra de sangre de la futura mamá y mediante ella se podrán controlar los niveles de la AFP en la sangre materna. La AFP es una proteína secretada por el hígado del feto, la cual luego es excretada en el torrente sanguíneo de la mamá. Por lo general, esta clase de prueba se lleva a cabo para asegurarse y controlar de que el bebé no padezca de ningún defecto del tubo neural, como por ejemplo la espina bífida y la anencefalia. La misma además podría indicar: defectos en las paredes abdominales, atresia esofágica y duodenal, algunas anomalías en los riñones y en el tracto urinario, síndrome de Turner, el nacimiento de fetos con muy bajo peso, complicaciones placentarias y la posible presencia de Síndrome de Down en el bebé.

Control Médico Triple
El control médico triple, también conocido como prueba de control del suero materno, o simplemente como MSS (por sus siglas en inglés), es un simple y totalmente inocuo análisis de sangre, encargado de medir no sólo los niveles de AFP, sino también los de la hormona hCG y los del estriol en la sangre materna. Todas las anteriormente mencionadas, son hormonas producidas por el feto que pasan durante el transcurso del embarazo al torrente sanguíneo de la mujer embarazada. Esta clase particular de prueba de control se realiza, por lo general, entre las semanas decimoquinta y decimoctava, y los resultados de la misma estarán disponibles en el término de una semana. La presencia de elevados niveles de AFP en la sangre materna podrían indicar que el bebé quizás estaría padeciendo algún defecto del tubo neural, como por ejemplo: una clase de deformidad en el canal vertebral del bebé conocido comúnmente con el nombre de espina bífida. Por el contrario, si los niveles de AFP en la sangre materna fueran bajos podrían indicar que el bebé podría padecer de Síndrome de Down u otra clase de defecto de origen cromosómico.

Esta prueba en particular es mucha más fiable y precisa que la anteriormente mencionada y además es capaz de analizar la presencia de posibles problemas genéticos adicionales; y en la actualidad está comenzando a reemplazar a la prueba AFP estándar. Hablando en términos generales, cualquier tipo de combinación realizada en esta prueba podría ser capaz de identificar al 60% de los bebés que padecieran de Síndrome de Down y entre el 80% y el 90% de los bebés que padecieran de algún defecto del tubo neural. La prueba AFP es por lo general más sensible si se realiza entre las semanas decimoquinta y decimoséptima del embarazo, a pesar de que dicha prueba de control podría realizarse unas semanas antes.

Control Médico Cuádruple
Hace muy poco tiempo se ha agregado a la prueba de control anteriormente mencionada una nueva prueba, conocida comúnmente como prueba o examen de control cuádruple, el cual es casi idéntico al anterior (el control médico triple), excepto por el hecho de que este control será capaz de arrojar un resultado adicional. Nuevamente, mediante la utilización de una muestra de sangre de la futura mamá, el control médico cuádruple se encargará de medir los niveles de alfafetoproteína en la sangre materna, así como los de la hormona hCG, los del estriol y los de la inhibina, a fin de indicar si su bebé corriera alguna clase de riesgo de sufrir Síndrome de Down. El control médico cuádruple presenta cerca de un 81% de efectividad y usualmente se realiza cuando la futura mamá se está acercando a la decimosexta semana de su embarazo. Si dicho control indicara que el bebé podría correr peligro de sufrir de Síndrome de Down, se podría realizar un estudio de amniocentesis para poder confirmar este diagnóstico.

Someterse a estos Controles Médicos o no Hacerlo
Algunas de las opiniones controversiales que rodean a esta clase de controles médicos surgen como resultado de pruebas que han arrojado falsos resultados positivos. Estas han sido pruebas que indicaban la presencia de alguna clase de defecto en el feto cuando en realidad el mismo era sano y saludable. Es muy importante tener en cuenta el siguiente dato: sólo una o dos mujeres de entre 50 que presenten niveles fuera de lo normal podrán afectar al feto. Otras razones que podrían provocar la presencia de resultados anormales arrojados por la prueba de control triple podrían incluir el hecho de estar embarazada de mellizos, que el feto fuera o unas semanas más viejo o más joven de lo que se creía originalmente, o que las pruebas se hubieran realizado de la manera incorrecta.

Es sumamente importante tener en cuenta que la prueba de control triple no será capaz de diagnosticar los defectos de nacimiento; sino que sólo podría indicar un incremento en el riesgo de que el bebé sufriera alguna clase de defecto o anomalía. Cualquier resultado anormal arrojado por esta prueba indicaría que sería necesario que la futura mamá se sometiera a una serie de análisis adicionales, lo cual traería como consecuencia que la mujer embarazada debiera realizarse análisis más peligrosos que podrían poner en riesgo tanto su propia vida como la de su bebé, innecesariamente. Además, se deberá tener en mente que esta clase de pruebas se les ofrecerán a todas las mujeres que estuvieran esperando un bebé, pero a muchas de ellas se les ha hecho creer que la realización de las mismas es obligatoria. Es por ello que usted debería sentirse segura y mantenerse constantemente informada sobre los posibles beneficios y los riesgos que conllevarían tanto la prueba de AFP como también el examen médico triple, antes de tomar una decisión al respecto.

El hecho de someterse o no a dichas pruebas de control es una decisión muy complicada y nada fácil de tomar, a la vez que la misma es sumamente personal y depende de cada mujer. Algunas mujeres están convencidas y sienten de corazón que sin importar que algo anduviera mal con su bebito/a, según fuera su sexo, no interrumpirían su embarazo bajo ninguna circunstancia, y por ello es que deciden no someterse a esta clase de controles. En cambio, otras mujeres se muestran deseosas de someterse a las mismas y muy felices al obtener resultados normales, aún sabiendo que los mismos no les garantizarán que alguna complicación pudiera surgir más adelante.

Los resultados de estas pruebas de control son generalmente presentados mediante porcentajes,como por ejemplo: el riesgo de que su bebé corra peligro de sufrir una anomalía en el cromosoma x es de 1 en 500. Es por ello que es muy importante recordar que el hecho de correr tal riesgo no siempre significará que su bebé padecerá de algún defecto. Usted debería concertar una cita con su doctor de cabecera a fin de que el mismo le explique en detalle los resultados de dichos exámenes. Y además sería muy importante que no dejara de tener en cuenta que una prueba de amniocentesis podría ser muy útil para confirmar los resultados arrojados por el examen médico triple.

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