Equilibrando el Trabajo, la Paternidad, y Su Familia

Trabajo, paternidad, familia y amigos; puede ser una tarea sumamente difícil de equilibrar. En algunos momentos, podría causarle estrés y podría tensar sus relaciones familiares y profesionales.

No deje que las cosas se le escapen de las manos, organícese y siga estos prácticos consejos antes de que comience a salirle humo por las orejas.

Hable con su Jefe
Es completamente entendible que mientras su familia probablemente sea su prioridad número uno, el hecho de ser capaz de trabajar para mantener a su familia significará que -algunas veces- el trabajo precederá a sus otras obligaciones. Para lograr que el trabajo no se convierta en `todos´ los motivos de sus conversaciones, hable con su jefe y asegúrele que a pesar de estar concentrado en su familia, dicha atención no comprometerá su ética laboral ni su productividad.

Administre su Tiempo
Si su trabajo le permitiera tener horarios flexibles, debería asegurarse de estar sacando el mayor provecho de ello. Si su cronograma de trabajo no fuera tan flexible, debería administrar su tiempo un poco más cuidadosamente. Podrá utilizar el tiempo que viaja cada día para ir al trabajo en tren para adelantar cuestiones de papeleo laboral. Si no se sintiera absolutamente exhausto para cuando llegara el final del día, debería utilizar las horas en las que sus hijos se van a acostar para poder terminar su trabajo.

Comparta Responsabilidades
Teniendo en cuenta la situación económica actual, muy pocas familias pueden mantenerse con un solo salario. Si ambos integrantes de la pareja trabajan, usted debería tratar de compartir las responsabilidades al cuidar a su bebé recién nacido. Sin importar si ello significara turnarse para alimentar al bebé, bañarlo, cambiar pañales o pedir licencia si su bebé se contagiara algún virus desagradable.

Pida Ayuda
Si no pudiera permitirse el lujo de contratar a alguien para que lo ayude, debería -por todos los medios- buscar a alguien que cuide de su bebé, incluso si ésto significara pedirle ayuda a su suegra. Tener a alguien en la casa para que contribuya con el lavado de la ropa le dejará algo de tiempo libre para poder cuidar mejor a su pequeñito/a. Aparte de ayudar durante el nacimiento de su bebé, una doula podría brindarle ayuda al cuidar a su bebé, y colaborar con su pareja - estando en su propio hogar- durante todo el período de postparto. Ésto también le dejará más tiempo libre para atender su pequeñito/a.

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