La Electroeyaculación por Sonda Rectal
Varias técnicas de reproducción asistida requieren que el hombre produzca semen para proporcionar una muestra del mismo, a fin de fertilizar los óvulos de su pareja fuera del útero de la misma. No obstante, mientras la mayor parte de los hombres pueden solucionar estos problemas por sí mismos, y producir el esperma sin necesidad de asistencia alguna; otros hombres no podrán lograrlo. Para estos hombres se ha desarrollado la técnica de electroeyaculación por sonda rectal.
¿En Qué Consiste la Electroeyaculación por Sonda Rectal?
La electroeyaculación por sonda rectal (ESR), también conocida como electroeyaculación (EEJ) es un procedimiento diseñado para contribuir en el proceso de extracción y de recuperación del esperma viable del cuerpo de aquellos hombres que presentaran problemas para producirlo por sí mismos. Este procedimiento está siendo implementado desde el año 1948, y el mismo ayuda a estimular al hombre para que éste pueda liberar su esperma durante la eyaculación. Para llevar a cabo una eletroeyaculación por sonda rectal se utiliza una sonda unida a un dispositivo que trasmite corriente eléctrica, el cual se encarga de inducir la erección y la posterior eyaculación. Una vez que se libera el contenido de la eyaculación, el mismo es recolectado y preparado para luego ser utilizado en algún procedimiento de inseminación artificial.
¿Quiénes Deberían Utilizar la Electroeyaculación por Sonda Rectal?
La electroeyaculación rectal fue diseñada específicamente para ayudar a ciertos grupos de hombres que luchaban por curar sus problemas de infertilidad. Este tratamiento diseñado para revertir la infertilidad es sumamente adecuado para ser utilizado por hombres que posean un alto conteo espermático, pero cuyo esperma sea defectuoso o de baja calidad.
Por lo general, la electroeyaculación no es un tratamiento de primera línea, sino que se trata de un tratamiento de segunda línea, el cual debería ser utilizado luego de haber probado innumerables tratamientos sin obtener los resultados deseados. Entre los candidatos que podrían someterse a una electroeyaculación por sonda rectal se podrían incluir a los siguientes:
Aquellos hombres que padecieran alguna clase de daños o lesiones en la médula espinal: Cada año existen más de 10.000 personas que sufren lesiones en la médula espinal solamente tomando en cuenta los casos presentes en los Estados Unidos. Las lesiones en la médula espinal son una de las principales causas de infertilidad, debido a las imposibilidades que estas lesiones provocan, causando dificultades para mantener una erección y para lograr una eyaculación. De hecho, sólo el 5% de los hombres que padecen de lesiones en la médula espinal serán capaces de concebir un bebé junto a su pareja sin necesidad de recurrir a algún tipo de asistencia médica. Los hombres que padecen de lesiones en la médula espinal, frecuentemente, presentan un alto conteo espermático, pero su esperma no cuenta con la suficiente calidad (por ejemplo: padecen de poca motilidad); provocando que el esperma permanezca atrapado dentro del cuerpo del hombre por un extenso período de tiempo. La electroeyaculación por sonda rectal podría ayudar a varios hombres que padecieran este tipo de lesiones o daños a lograr una erección y a producir la suficiente cantidad de sustancias provenientes de una eyaculación como para poder concebir un bebé.
Aquellos hombres que padecieran diabetes: Alrededor del 50% de los hombres diabéticos podrán llegar a sufrir alguna clase de disfunción sexual. Algunos de estos problemas de infertilidad provienen o tienen su raíz en factores psicológicos, mientras que otros surgen como el resultado de daños o lesiones en sus nervios, o por problemas circulatorios causados por la propia diabetes. Los diabéticos insulino-dependientes, en la mayor parte de los casos, serán excelentes candidatos para someterse a una electroeyaculación por sonda rectal.
Aquellos hombres que padecieran esclerosis múltiple (EM): La esclerosis múltiple es una enfermedad que ataca el sistema nervioso central, causando dolores insoportables y muy agudos, debilidad, y fatiga. La esclerosis múltiple -en la mayor parte de los casos- provoca infertilidad en los hombres; ya que la misma inhibe los movimientos y la recepción y la respuesta nerviosa del cuerpo. Los pacientes que sufrieran de EM y que desearan concebir un bebé podrían llegar a ser los candidadtos ideales para someterse a un tratamiento de electroeyaculación por sonda rectal.
¿Cómo se LLeva a Cabo Este Procedimiento?
Este procedimiento es extremadamente seguro y se lleva a cabo en aproximadamente tan sólo 30 minutos.
El mismo no se realiza en una clínica de fertilidad, sino en un hospital; ya que se requiere el uso de anestesia general. Pero, a pesar de ello, usted debería ser capaz de volver a su trabajo normalmente al día siguiente. Antes de que el tratamiento comenzara, usted debería concertar una cita con su doctor de cabecera o con el especialista que lo estuviera atendiendo, y además, debería realizarse una serie de exámenes físicos exhaustivos, para poder determinar si usted contara con todas las condiciones físicas y generales para someterse a este procedimiento en particular.
Cuando llegue al hospital para someterse a este tratamiento, se le insertará un catéter dentro de su vejiga a fin de vaciarla completamente. Si su orina fuera particularmente ácida, se le realizaría un lavado de vejiga utilizando bicarbonato de sodio, para así poder evitar que el ácido de su orina matara los espermtozoides. Por otra parte, es necesario tener en cuenta que varios hombres sufren de eyaculación retrógrada, siendo ésta una condición médica mediante la cual el contenido de la eyaculación se filtra dentro de la vejiga antes de eyacular. En estos casos particulares, dicho esperma podría ser extraído durante el tratamiento y posteriormente utilizado para efectuar una inseminación artificial, para lo cual sería indispensable el vaciamiento y lavado de la vejiga.
Por otra parte, seguramente se le suministrará un anestésico general antes de que se proceda a llevar a cabo el tratamiento. Aquellos hombres que sufrieran de lesiones en su médula espinal/ósea no necesitarán el uso de anestesia general, debido a que los mismos serán insensibles al dolor. Una vez que el anestésico comience a surtir efecto, se lo recostará sobre su lado derecho. Su doctor insertará en su recto un protoscopio, el cual podría tratarse de un tubo lubricado, de material plástico o metálico. Este implemento ayudará a su doctor a inspeccionar la membrana rectal, a fin de asegurarse de que la misma no estuviera lesionada.
El próximo paso será la inserción de una sonda dentro de su recto. Dicha sonda estará unida a un dispositivo de corriente eléctrica, el cual enviará la corriente necesaria hacia su membrana rectal. La sonda se encargará de estimular las paredes de su recto al ir incrementando su intensidad a intervalos de 4 segundos. El voltaje de la corriente se irá elevando gradualmente hasta que alcance los 10 voltios. Si luego de llevar cabo todo este procedimiento no se lograra una eyaculación, el voltaje debería seguir incrementándose muy lentamente. La mayor parte de los pacientes lograrán eyacular cuando se les apliquen 20 voltios.
Mientras que la sonda esté colocada en el lugar adecuado, un asistente médico deberá masajear su glándula prostática y su uretra. Una vez que se logre la eyaculación, dicho asistente recogerá las sustancias provenientes de la misma y las colocará en un envase/recipiente esterilizado. Luego, se tomará el contenido del envase para poder prepararlo para realizar la fertilización in vitro, o aplicarle la inyección de esperma intracitoplasmática (ICSI) o para congelar el mismo, y utilizarlo en el futuro. Más tarde, se le insertará otro protoscopio en su recto para poder verificar y descartar la posibilidad de que alguna clase de trauma o daño pudiera haber ocurrido durante el procedimiento.
Posibles Complicaciones
La electroeyaculación por sonda rectal es un procedimiento muy seguro, el cual presenta muy pocos riesgos potenciales. Sin embargo, en algunos casos, el uso de anestesia general podría acarrear el riesgo de generar posibles traumas, incluso hasta podría llegar a poner en peligro la vida del paciente; a pesar de que estos riesgos serían muy bajos y raras veces llegaran a manifestarse.
En algunas ocasiones podrían provocarse quemaduras menores en la zona del recto si la sonda eléctrica hubiera alcanzado altas temperaturas. Es por ello que la temperatura de la sonda eléctrica deberá ser monitoreada constantemente durante el procedimiento, y así verificar que la misma no exceda los 102ºF (39°C), si llegara a alcanzar esta temperatura, la misma sería inmediatamente enfriada o extraída de su recto.
Los hombres que padecieran lesiones en su médula ósea correrían mayores riesgos de desarrollar presión arterial extremadamente elevada, conocida con el nombre de hiperreflexia autonómica. Por lo general, a este grupo de pacientes de alto riesgo, se le suministrarán una serie de medicamentos formulados para disminuir la presión arterial elevada/hipertensión arterial, antes de que se lleve a cabo este procedimiento.
Las Ventajas de Este Tratamiento
Luego de que el procedimiento haya finalizado; el esperma recolectado podrá ser lavado y preparado para poder ser utilizado en diversos tipos de tratamientos de inseminación artificial. Las probabilidades de concebir un bebé son bastante buenas, pero dependerán del tipo de tratamiento de inseminación elegido.
Los tratamientos de FIV y la ICSI son los que producirán los mejores resultados, contando con un 44%-88% de probabilidades de lograr concebir un bebé. Desafortunadamente, la mayor parte de estos tratamientos no estarán cubiertos por los seguros médicos y serán extremadamente costosos. Dicho tratamiento, junto a la inseminación podría llegar a costar entre $10.000 y $15.000.
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