Consejos Prácticos para una Efectiva Crianza Compartida

Ser una madre soltera acarrea una gran cantidad de desafíos particulares. No obstante, más allá de las inevitables preocupaciones y tribulaciones que irán surgiendo a medida que su hijo/a vaya creciendo, las madres solteras deben afrontar la doble responsabilidad de aprender cómo compartir la crianza de sus hijos efectivamente con su ex pareja. Para algunas mujeres, ésto puede resultarles algo sumamente natural, pero para otras puede llegar a transformarse en una situación realmente dificultosa; particularmente si existieran problemas de comunicación y/o conflictos relacionados con el estilo de crianza propuesto por cada uno de los padres.

Es por ello que, el hecho de aprender a cómo criar a su hijo/a junto a su ex pareja como si se tratara de un equipo será la mejor manera de asegurarse de que su hijo/a reciba la mejor educación posible. Ésto también podría atenuar algunos de los efectos negativos dejados por el divorcio en la vida del niño/a. Lo más recomendable sería que se informara sobre las estrategias de crianza compartida más eficaces que pudieran adaptarse a cada situación en particular.

LO QUE DEBERÍA HACER: Establecer un estilo o estrategia metódica y eficiente.
En lugar de pensar en el otro padre de su hijo como si fuera su ex pareja, o cualquier otro término despectivo, piense en él como si fuera un compañero de trabajo. En los lugares en donde desempeñamos nuestras tareas tendemos a trabajar con una gran variedad de personas diferentes, algunos de los cuales nunca tendríamos en cuenta para relacionarnos fuera de la oficina. No obstante, siempre nos las arreglamos para encontrar la mejor manera de relacionarnos con otras personas, para poder mantener la integridad en nuestros trabajos, o - por lo general- por cuestiones de negocios. Piense en la seguridad de sus hijos y en el bienestar de los mismos como si fuera su "negocio"; el éxito del mismo dependerá en gran parte de su capacidad para cooperar con su ex pareja.

LO QUE NO DEBERÍA HACER: Hablar negativamente acerca del papá de su hijo/a.
Ésto incluye: no permitir que otras personas hablen negativamente acerca de su ex pareja, de sus familiares y de sus amigos, o de su hogar; especialmente delante de su hijo/a. Por otro lado, no es para nada apropiado discutir o hacerle preguntas a su hijo/a sobre la vida personal de su ex pareja. En otras palabras, LO QUE DEBERÍA HACER es no utilizar al niño/a para espiar a su ex pareja.

LO QUE DEBERÍA HACER: Comunicarse con su ex pareja semanalmente.
A pesar de que ésto podría parecer una tarea imposible para algunos padres – especialmente para aquellos que recientemente han experimentado un divorcio – el hecho de aprender a comunicarse periódicamente con su ex pareja será algo extremadamente importante, ya que de esta manera podrá demostrarle a su hijo/a que como padres, ustedes cuidarán de él/ella siempre y le brindarán todo lo que necesite. También será otra excelente manera de contener dilemas inesperados en lo referente al regimen de visitas; ya que ambos padres se mantendrán al tanto de cualquier clase de actividad académica o educativa, de cualquier problema médico, o del estado de las actividades extracurriculares, así como también de cualquier otro tipo de tarea o actividad relacionada con su hijo/a.

Para facilitar ésto, sería una muy buena idea el hecho de elaborar un esquema que incluyera todos los temas que deseara discutir regularmente con su ex pareja, y así podría rellenar el formulario luego de cada reunión. Si cada uno de ustedes realizara el esfuerzo de HACER ésto antes de cada reunión o encuentro, muy pronto se darían cuenta de que dichas reuniones se irán volviendo cada vez más productivas. Ésto también la ayudará a guiar la reunión en la dirección correcta, y a mantenerse alejada de cualquier clase de conversación negativa.

LO QUE NO DEBERÍA HACER: Tomar decisiones relacionadas con el regimen de visitas en ausencia del padre del niño/a.
Ésto significa no programar las actividades de su hijo/a durante los días en los que el niño/a debe pasar con su padre sin contar con el consentimiento previo de su ex pareja. No obstante, es muy importante que ambos padres actúen en conjunto, a fin de permitirle a su hijo/a poder participar de actividades extracurriculares.

LO QUE DEBERÍA HACER: Establecer reglas similares.
Es sumamente importante establecer normas hogareñas similares cuando se trate de fijar tácticas disciplinarias, así como también rutinas; entre las que se incluyen: horarios para dormir y para comer. De esta forma, su hijo/a podría comprender que su comportamiento será recompensado/castigado similarmente, sin importar con cuál de sus padres esté pasando el día.

LO QUE NO DEBERÍA HACER: Tratar de ganarse el apoyo de su hijo/a siendo más indulgente.
Ésto creará confusión y posterior resentimiento en su hijo/a a medida que vaya pasando el tiempo. Es realmente importante que ambos padres eviten poner en práctica cualquier clase de táctica que crean que podría hacerlos ver como héroes o como más buenos ante los ojos de su hijo/a. Ésto incluye: no hacerle promesas al niño/a para tratar de ganar su apoyo a expensas del otro padre, no forzar a su hijo/a a elegir dónde le gustaría pasar su tiempo, y no hacerlo/a sentir culpable por disfrutar del tiempo que pasa junto a su padre.

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